sábado, 30 de mayo de 2020

Pan Casero Sin Gluten, el libro de Juan Carlos Menéndez Cogolludo

Hoy estoy muy contenta. Sí, muy contenta por lo que vengo a contaros. Esta semana que finaliza celebramos el día nacional del celíaco y muchos de nosotros aprovechamos un día tan señalado para lanzar proyectos e iniciativas relacionadas con el mundo sin gluten, ese que nos ha tocado vivir y que se ha colado en nuestras vidas para quedarse.
Hace poco más de 7 años que la celiaquía llegó a nuestras vidas para quedarse.  Entonces tocó sacudirse y reciclarse. En este tiempo han cambiado muchísimo las cosas y entre todas creo (sin miedo a equivocarme) que lo que más ha avanzado es el mundo del PAN SIN GLUTEN
Hoy estoy muy contenta por ellos, por Juan Carlos y Pamela, mis queridos amigos de la escuela Espíritu del Bosque, que se han lanzado a la aventura de escribir el libro de Pan Casero sin Gluten, que ya tengo en mis manos. Escribir un libro es como tener un hijo, ¡qué digo un hijo!, es como tener familia numerosa, con sus noches en vela, su trabajo hasta llegar a ver claro lo que queremos y como lo queremos hacer. Pero entonces llega el día que “nace” y todo se olvida. 
¿Qué os voy a decir del libro? Que es una joyita, un imprescindible si eres celíaco. Nos cuenta ingredientes desde las harinas más utilizadas hasta los aditivos que nos ayudan a que nuestros panes sean maravillosos, también nos da muchas recetas, desde las básicas hasta panes “creativos” (que no os voy a desvelar) pero que sólo viendo las fotos se me hace la boca agua. 
Pero sin duda alguna para mi la parte dedicada a la técnica es la más importante e interesante de este libro, ya que recetas hay muchísimas, a golpe de click podéis encontrar miles en internet, unas con más acierto que otras, pero una receta (incluso las que aparecen en el libro) sin utilizar la técnica adecuada no va a funcionar. 


Un formato cuidado, con unas fotos magníficas y sobre todo y lo más importante, las explicaciones de un Maestro que nos ha cambiado la vida a muchos. A mí y a mi peque las primeras. En verano de 2015 fue la primera vez que subí a Robledondo a hacer un curso de pan, desde entonces he repetido en varias ocasiones en diferentes cursos.  
Por supuesto que este libro no puede sustituir esos cursos de los que os hablo y que he tenido la suerte de recibir en varias ocasiones. Porque (lo he dicho siempre) subir a Robledondo al Espíritu del Bosque, es algo más que hacer un curso. Es una jornada llena de sorpresas, buen ambiente, rodeada por ese entorno maravilloso y esos duendes mágicos que pueblan la escuela y el bosquecillo que la rodea. Es una convivencia extraordinaria donde puedes ver y tocar y aprender y cómo no hacer “las preguntas del millón”, que Juan Carlos responde siempre con una sonrisa y un buen hacer que le ha llevado a ser referente en el mundo de la panificación sin gluten. 
Año 2015 Curso de Pan Casero Sin Gluten
En la Escuela Espíritu del Bosque
Año 2015 Curso de Pan Casero Sin Gluten
En la Escuela Espíritu del Bosque
Hoy estoy muy contenta, por ellos, pero también por todos los celíacos que no tienen la posibilidad como yo he tenido de acercarse al Espíritu del Bosque, porque con este libro podrán hacer panes que os puedo garantizar que en una cata a ciegas algunos no serían capaces de decir si llevan gluten o no. 
Hoy estoy muy contenta, y me repito, aunque al mismo tiempo un poco triste. Espero que las circunstancias que estamos viviendo nos permitan vernos pronto, porque tengo mi libro pero me gustaría poder disfrutar de una jornada con Juan Carlos y Pamela, una puesta de largo como se merece.

viernes, 3 de enero de 2020

Roscón de Reyes 2020


El año pasado os traje una receta de roscón con mixes comerciales. Una receta muy sencilla que podéis ver aquí.

Este año quería hacerlo con harinas naturales y aquí tenéis el resultado. La verdad es que estoy muy contenta tanto con la textura como con el sabor. He intentado simplificar la receta al máximo para que  podáis hacerla con la mínima cantidad de ingredientes y con pocas complicaciones, ya que el roscón de reyes es un bollo que tiene una cierta complicación en su elaboración, incluso con gluten. 

Todavía estáis a tiempo de regalar a vuestra familia un roscón rico rico y casero. Veréis que el resultado merece la pena y vais a disfrutarlo todos.

Vamos con la recetiña.

Ingredientes:

150 gramos de almidón de trigo (podemos sustituirlo por 75 de almidón de maíz y 75 de almidón de patata)
1 huevo M
45 gramos de azúcar (yo moreno ecológico)
35 gramos de leche
30 gramos de mantequilla
15 gramos de ron
3.5 gramos de goma xantana
2.5 gramos de psyllium
2.5 gramos de impulsor
2.5 gramos de levadura instantánea para masas dulces
1.25 gramos de sal
Aroma de azahar
Aroma de naranja (o bien ralladura de naranja)

Elaboración:

En el bol de la amasadora (podéis utilizar la panificadora a modo de amasadora si no tenéis) batimos los huevos con el azúcar hasta que espumen. 

Mientras tanto vamos pesando los ingredientes secos. Los mezclamos todos bien y reservamos.

Cuando estén espumados los huevos añadimos el ron y los aromas, mezclamos bien y añadimos los ingredientes secos. Cuando empiecen a estar integradas las harinas añadimos la mantequilla en trozos pequeños que estará en pomada. Dejamos que continúe el amasado hasta llevar 20 minutos más o menos. 

Sacamos la masa del bol y la dejamos sobre una superficie que habremos enaceitado previamente. ¡Ojo! Cuando digo enaceitado no quiero decir que hagamos una piscina de aceite, bastará con que nos humedezcamos la palma de las manos con un poco de aceite y la pasemos por la encimera. Con las manos también enaceitadas boleamos. Y una vez tengamos la bola formamos el roscón. En el video del año pasado os mostré como dar forma con nuestras masas que son un poco más pringosas que las masas con gluten. Me gusta fermentar con el roscón formado ya que si fermento y desgasifico después le cuesta mucho recuperar la fermentación. 

Lo dejamos tapado y que fermente. Una vez haya doblado su tamaño lo pincelamos con huevo batido y decoramos con lo que más nos apetezca. Con el horno precalentado a 180 grados con calor arriba y abajo lo metemos y dejamos hornear, entre 25 y 35 minutos estará el roscón.



Una cosa que me gusta hacer es cuando ha terminado el horneado no lo saco directamente del horno sino que abro y dejo que el horno vaya perdiendo calor poco a poco. 

Y ya tenéis vuestro roscón de reyes, que queda así de maravilloso y rico, en el video podéis apreciar lo blandito que está, para poder rellenarlo de lo que más os guste aunque a mi, sinceramente, como más me gusta el roscón es sin relleno. 

Felices Reyes.